jueves, 3 de diciembre de 2009

Primer día, 19 de Noviembre

20:15
¿Baile?
Después de la última ponencia habían otra pausa para café ceniciento antes de trasladarnos al edificio de deportes. He creido oportuno no comer en esa pausa ya que no quiero ceanr cuando llegue a casa. Hemos estado esperando un rato hasta que el taller estaba preparado.
Entramos en una sala que estaba decorada con luces (tipo árbol de navidad), una cortina negra que cubría las paredes y una especie de altar construido con una escalera en la cual, estaba situada la "ponente", Gabriela Maiztegui (no me sale llamarla ponente depues de lo del "machete"). El taller consistía en una serie de bailes, el primero era la estación del encantamiento, el cual servía de introducción para que la gente se fuera deshinibiendo.
La segunda estación se llama nuestro par, consistía en que se nos vendaba los ojos a todos y se nos colocaba en parejas, depués se bailaba y se intentaba sentir a la pareja por todos los sentidos menos la vista. Ya que vivimos en una socidad en la que la imagen vale tanto, creo que es muy interesante dejarla a un lado de vez en cuando y aceptar otros tipos de belleza (además de la física). Creo que este fue el punto algido del tarller de los bailes porque Gabriela invitó a "enamorarnos" de la pareja que nos había deparado el azar y, la mayoría de la gente eran chicas. Yo tuve suerte porque era seguro que me iba a tocar con una chica. mientra bailabamos intenté conocerla por la voz, tocandola el pelo, pidiendola su nombre y descripción pero me fue imposible.
La tercera estación, el rostro del amor, nos desveló la cara de nuestra pareja. La priemra sensación que tuve al quitarme la venda fue de que los ojos no me respondían y querían seguir oegados. Luego contemplé el rostro de Carolina y la reconocí. Volvomos a bailar para celebrar el encuentro con la pareja
En la última estación, el trance tras las cenizas, nos relajamos a priorí. Pero después Gabriela sorprendió a propios y extraños con una danza-cantico de los esclavos americanos. Ese baile del machete nos contagió a todos y el ritmo se nos metió en la sangre.
21:35
Termina el primer día y estoy cansado, pero muy ilusionado por todo lo que he vivido. Todavía queda un día

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