miércoles, 25 de noviembre de 2009

Primer día, 19 de Noviembre

7:15.
Suena el despertador.
Hacia tiempo que no iba a la que éra mi facultad puesto que ya había termiando la carrera, bueno me quedaban unos pocs créditos de libre configuración. Desde hace un mes estaba esperando para poder quitarme de encima esos créditos, ese seminario sobre la Cenicienta no tenía mala pinta, dos días, intensivo y dos créditos...un momento ahora que me acuerdo, yo tenía que disfrazarme para poder asistir al seminario y llevar comida, joder lo que hay que hacer por 2 créditos. Bueno Miguel, tranquilo, por peores cosas hemos pasado.

8:50.
Aquí estoy.
En frente del salón de actos de la facultad de Educación, menuda pinta llevo... vaqueros, chupa de cuero y...un delantal y un cepillo.
Empieza a llegar gente, curiosamente son todo chicas. Chicas que se van al baño y vuelven disfrazadas de princesas y de limpiadoras con la cara maquillada para aparentar suciendad. Pero si eso es curioso, lo mejor son las que se suponen que son las ponentes, ellas ambién van disfrazadas y no se ocultan. Empiezo a pensar que no ha sido tan mala idea este seminario.
Entre tantas chicas veo una que no lleva disfraz, lleva una especie de diadema con una cartulina en la que se predicas valores como igualdad, derecho a soñar...la verdad, es que si tuviera que describir a la mujer de hoy en día aparecerían todos los valores de esa diadema-cartulina.
¡Raúl! Joder que casualidad, tu también estás aquí y, por lo que parece, somos los únicos chicos, bueno vamos a ir pasando al salón de actos.

9:40 (creo)
La primera ponencia la hace Sonsoles San Román una sociologa de la UAM que nos cuenta el origen del cuento de la Cenicienta, ella nos dice en la Europa de los siglos XVII y XVIII trajo la burguesia y el liberalismo y como consecuencia, el acefcamiento de la mujer a la vida pública. Por ello se creó la Cenicienta, para ser un referente moral hacia las mujeres. Sonsoles señala diferencias entre moral y ética. Filósóficamente la ética tenía que ver con los público y lo político. Kant entiende la ética universal como derechos iguales pero excluye a la mujer, puesto que por naturaleza, la mujer fue creada para ser madre y esposa. A la mujer se le palica la moral y no la ética. El sitio de la mujer está en casa, no en un trabajo propio, ni en la vida pública, en el suelo, que quede clara su indefensión y su sumisión ante el hombre (todavía me acojonan las ideas tan marcianas que han predominado en la sociedad hace no tantos años).
La moraleja de la Cenicienta nos viene a decir que cuando una mujer es "buena", callada, sin aspiraciones, si es esclava de su trabajo, sumisa, si no tiene afán por salir y divertirse o simplemnte ser como otro hombre, será recompensada con una vida de enseueño en la que un "principe" que ella no ha elegido la hará de su propiedad y la colamará con otra vida de sumisión, manipulación y esclavitud.
Puesto que este mensaje y estos valores son los que se vierten en la Cenicienta, Sonsoles pone en duda su validez hoy en día tanto para entreter como uso didáctico ya que, esos valoes han quedado desfasados y las personas clamamos por un ideal de igualdad, de justicia, de democracia y de solidaridad.
Cuidado con utilizar los cuentos clásicos sin relfexión, sin tener en cuenta el contexto en el que se desarrollan, porque esos valores están ahí.
Yo tuve un profesor en la carrera que nos dijo que la sociendad la formamos nosotros. La cultura, las creencias, costumbres...son una lluvía muy fina que parece que no moja, parece que nosotros somos ajenos y críticos con todo lo que nos rodea, pero cuando te paras a pensar estás tan "calado" de la lluvía que lo único que se te ocurre es que hay que vaciarse de muchas cosas para poder ver con otros ojos, mirar con distancia y reflexionar con un poco de sentido

No hay comentarios:

Publicar un comentario